No solo basta con tener un buen proveedor de internet, obviamente estos es importante pero hay que tener otras cosas mas en cuenta. Hay que tener claro que una conexión a Internet depende de muchas cosas, y que por ello tendremos que ir más allá si queremos disfrutar de una experiencia realmente óptima.
En este artículo, queremos compartir enseñar cinco cosas que debemos evitar si queremos disfrutar de las ventajas que aporta una buena conexión a Internet. Asi que empecemos.
1.-Olvidarte de las actualizaciones
No nos estamos refiriendo únicamente a las actualizaciones del sistema operativo, sea computadora, smarphone, tableta, o de las aplicaciones que utilices con más frecuencia, sino también a las del modem.
El modem es un elemento clave que determina, en gran medida, si tendremos una mala o una buena conexión a Internet. Es fácil de entender, dicho dispositivo actúa como una conexión entre nuestro equipo y los distintos servidores que alojan las páginas y servicios web que dan vida a Internet, así que si este falla, todo falla.
Muchos fabricantes, lanzan actualizaciones de forma periódica y remota que nos permitirán mejorar el rendimiento, la seguridad y la fiabilidad de nuestro router. También pueden ayudarnos a corregir errores o fallos de seguridad importantes. Es recomendable, por tanto, buscar actualizaciones con frecuencia. Sin embargo no todos los proveedores de internet nos permiten entrar al router para evitar que el usuario desconfigure el mismo. Si en tu caso no sabes actualizar el modem o tu proveedor de internet no te lo permite, puedes preguntarle directamente si no existe una nueva versión mejorada de tu router.
2.-No proteger adecuadamente tu conexión
La seguridad es fundamental para tener una buena conexión a Internet, y supone uno de los problemas más frecuentes, aunque la culpa es, en la mayoría de los casos, del usuario.
Utilizar contraseñas fáciles de adivinar es como dejar la puerta medio abierta a los intrusos, y navegar por Internet sin un mínimo de protección y de sentido común también puede comprometer la integridad de nuestra conexión.
Los ladrones de Wi-Fi se han convertido en un mal más frecuente de lo que imaginamos, y el malware(Programa dañino) que puebla ciertas zonas de Internet también puede darnos disgustos. Utiliza siempre contraseñas fuertes, y evita seguir enlaces(paginas) dudosos y ejecutar aplicaciones que no sean de confianza.
3.-Descuidar la colocación del modem
Algo que es sumamente importante es colocar tu modem en el lugar adecuado, esto realmente puede marcar la diferencia entre tener una buena conexión a Internet o sufrir el estrés de una mala señal de internet. No exageramos, piensa que el Wi-Fi funciona a través de ondas de radio, y que estas tienen un alcance reducido que se ve, además, limitado por los obstáculos y las interferencias.
Ya hemos hablado de este tema en otros artículos, pero debemos tener en cuenta que no basta con colocarlo en el lugar adecuado, también debemos estar preparados para cambiarlo de sitio o para adaptarlo a los cambios que se producen en nuestro hogar u oficina.
Por ejemplo, si tenemos el modem en una posición céntrica, elevada y libre de obstáculos, pero con el tiempo acabamos colocando cerca de él fuentes de interferencia, deberíamos considerar cambiarlo de lugar para evitar problemas.
4.-No adaptarnos a los cambios
Nuestros dispositivos cambian con el paso del tiempo, la tecnología evoluciona, y las novedades que se introducen en nuestro día a día pueden marcar una diferencia importante que acabe afectando a nuestra conexión a Internet.
Piensa, por ejemplo, en un usuario que utiliza una conexión a Internet económica. Puede ser suficiente para cubrir un uso básico, pero si este decide comprar una consola de última generación, disfrutar de sus juegos favoritos, ver contenidos multimedia en streaming y existen muchos dispositivos con conexión a internet en la casa, cosa cambia, y mucho. Esa conexión, y su modem, se le habrán quedado pequeños, y deberá cambiarlos.
Una buena conexión a Internet no siempre debe cumplir unos mismos requisitos. En realidad depende de las exigencias de cada tipo de usuario, y por ello debes adaptarla por completo en función de tu situación, de tus necesidades, y de tus expectativas. ¿Qué cambios puedes hacer para actualizarte? lo veremos en próximos artículos.
5.-No hacer mantenimientos básicos
Calma, para tener una buena conexión a Internet no debes preocuparte por ella de forma constante, pero es conveniente que sigas un patrón de mantenimientos básicos para evitar disgustos.
- Revisa con cierta frecuencia los dispositivos conectados a tu red, así podrás identificar la presencia de intrusos, incluso aunque no notes problemas. Puedes hacerlo a través de la interfaz del modem o diferentes métodos
- Haz una prueba de velocidad y de latencia cada cierto tiempo para asegurarte de que tu proveedor cumple con lo estipulado en tu contrato
- Cambia la contraseña de tu Wi-Fi con cierta frecuencia, sobre todo si recibimos visitas y permitimos el acceso a nuestra red a personas que no son de total confianza.
Si algunos de los consejos que mencionamos en este articulo aun no sabes como realizarlos no te preocupes próximamente te lo enseñaremos.